Hernias discales, qué son y cómo se tratan

Para poder comprender que es una hernia discal y su mecanismo de producción, empezaremos dando un “paseo anatómico” por nuestra columna vertebral. La columna vertebral esta formada por:

  • 7 vértebras cervicales
  • 12 vértebras torácicas o dorsales
  • 5 vértebras lumbares
  • 5 vértebras sacras

Nuestra columna es el soporte principal de la parte superior de nuestro cuerpo. Nos permite mantenernos erectos, flexionar o girar nuestro tronco. También cubre y protege la médula espinal.

Hernia discal

La columna tiene cuatro curvaturas fisiológicas en el plano medio-sagital, que se denominan:

  • lordosis cervical
  • cifosis dorsal
  • lordosis lumbar
  • cifosis sacra

Las curvas dan a la columna vertebral: Resistencia y Elasticidad, de manera que la hacen 17 veces más resistente, que si fuera totalmente recta.

Entre las vértebras existe una estructura llamada disco intervertebral. Los discos intervertebrales son los discos que separan las vértebras de la columna vertebral. Cada uno forma un amortiguamiento cartilaginoso que permite ligeros movimientos de las vértebras. Su función es amortiguar las cargas y estabilizar el movimiento entre dos vértebras. Éste está formado por: el núcleo pulposo, que ocupa la parte central y el anillo fibroso, que recubre el núcleo pulposo.

A partir de los 30 años aproximadamente, pueden producirse cambios degenerativos en el disco, que conducen a una pérdida de resistencia y elasticidad. Estos cambios sobre la estructura del anillo fibroso hacen que éste no pueda contener el núcleo pulposo, desplazándose posteriormente y deformando el contorno del disco; esto se denomina protrusión discal (hernias contenidas). Si el núcleo pulposo sale hacia el exterior, más allá del contorno natural del disco se denomina hernia discal (con rotura).

La hernia discal es una patología en la que parte del disco (núcleo pulposo) se desplaza hacia la raíz nerviosa, la presiona y produce lesiones neurológicas derivadas de esta lesión. Alrededor del 1% de la población posee discapacidad crónica por este motivo.

Las hernias de disco son más frecuentes a nivel cervical y lumbar, por ser estos los segmentos de mayor movilidad de la columna.

Puede producirse por traumatismo, pero lo más frecuente es que sea degenerativa.

Hernia discal

Sintomatología

Una hernia discal puede producir una serie de manifestaciones clínicas, en las que el síntoma más característico es la ciática y la lumbalgia.

  • La lumbalgia es dolor focalizado en la zona baja de la espalda, que corresponde a la columna lumbar (L1-L5)
  • La ciática es el síntoma correspondiente a la irritación del nervio ciático. Suele manifestarse de forma unilateral (a excepción de hernias discales porteriores, que darían una sintomatología bilateral); dolor que se va hacia zona glútea y miembro inferior, generalmente más allá de la rodilla.

Hernia discal

Nota: no debemos confundir la ciática con una pseudociática o falsa ciática, ya que los síntomas son muy parecidos; en ambos casos se da una irritación del n. ciático, pero a diatinto nivel en su recorrido.

La pseudociática tiene como origen un sindrome compresivo del músculo piramidal, localizado en el centro de la zona glútea.

El dolor suele aumentar cuando aumenta la presión intradural: tos, defecación…(maniobra de Valsalva), flexión anterior de la columna y con la sedestación prolongada y mejora tumbado con las piernas flexionadas (posición de Fowler); el paciente se encuentra mejor andando que en bipedestación (de pie, quieto).

Otro síntoma frecuente es la parestesia, o sensación de hormigueo, en el trayecto del nervio irritado.

También pueden producirse pérdidas de fuerza, debido a la irritación o compresión de las raíces nerviosas, por déficit neurológico.

Diagnóstico

La resonancia magnética (RMN) es el procedimiento por excelencia para la detección de una hernia discal.

Además, es fundamental realizar una historia clínica y exploración física del paciente.

En ocasiones también se realizan pruebas neurofisiológicas.

Hernia discal

Tratamiento

Tratamiento quirúrgico: antes de aplicar el tratamiento quirurgico, todo paciente con ciática por presencia de hernia de disco ha de someterse a tratamiento conservador durante 4-6 semanas. La intervención quirúrgica la utilizaremos como última opción y cuando se den casos de lumbociática hiperalgésica, sindrome de cola de caballo y lumbociática paralizante.

Tratamiento conservador: en fases agudas lo esencial es el tratamiento sintomático del dolor.

Reposo, que suele variar de 2 – 7 días según la intensidad y la prevalencia de la sintomatología, en posición de Fowler (tumbado boca arriba con las rodillas flexionadas y la planta de los pies apoyada sobre el suelo, cama…)

Analgésicos

  • AINES (antiinflamatorios no esteroideos)
  • Esteroides, si persiste el dolor.
  • Relajantes musculares: si hay presencia de contracturas.

Fisioterapia

  • Termoterapia, superficial (infrarrojos) o profunda (ultrasonidos)
  • Electroterapia analgésica y antiinflamatoria.
  • Tracciones lumbares.
  • Hidrocinesiterapia.
  • Cinesiterapia.
  • Masoterapia.
  • Estiramientos musculatura lumbar.
  • Ejercicios de fortalecimiento faja abdominal.
  • Normas de higiene postural.